😇🌿 El Buen Samaritano

Nro. 874/ Año XVIII-27

Domingo 24 Post-Pentecostés/ TONO 7

EPÍSTOLA:

Ef 2:14-22

EVANGELIO:

Lc 10:25-37

COLOR LITÚRGICO: 

Dorado

Éste, es uno de los clásicos más sencillos y magníficos que se halla en toda la literatura sobre el tema de la bondad humana. En el capítulo 9, este mismo evangelista, narra cómo Jesús fue rechazado por los Samaritanos y, en el capítulo 10, se cuenta cómo reacciona Jesús, enalteciendo a un Samaritano como objeto del amor.

Jesús mismo, fue el hombre bondadoso que jamás haya vivido; eso se nos dice de Él como ningún otro en toda la historia; como se lee en el evangelio de San Juan (21:25), si todos los hechos de bondad que hizo en tres pocos años se escribieran, no habría libros en el mundo para llenarlos.

Jesús, habló mucho sobre la bondad, la costumbre sencilla antigua y cotidiana; por lo que decía, se puede concluir que deseaba ver en sus seguidores rasgos de bondad, más que en cualquiera otro; esas son cosas que le agradan.

Jesús, hizo tanto énfasis en la bondad que, se identifica a sí mismo con quienes la necesitan y, en efecto nos dice que no podemos ser sus amigos y, al mismo tiempo ser indiferentes con los necesitados, los oprimidos, los perseguidos, los humildes: “Y el Rey les dirá: En verdad os digo que cuanto hicisteis a unos de estos hermanos míos más pequeños, a mí me lo hicisteis." (Mt 25:40). Nos da a entender que el reino de los cielos, será la morada de aquellos que han aprendido a ser bondadosos: Entonces dirá el Rey a los de su derecha: "Venid, benditos de mi Padre, recibid la herencia del Reino preparado para vosotros desde la creación del mundo". (Mt 25:34).

En el día del Juicio final, habrá sorpresas; porque algunos acostumbran a pensar de sí mismos que son muy religiosos pero, tardíamente se darán cuenta que han estado pasando por alto aquellos cosas que de las cuales los Ángeles han estado tomando nota: "Y él entonces les responderá: En verdad os digo que cuanto dejasteis de hacer con uno de estos más pequeños, también conmigo dejasteis de hacerlo." (Mt 25:44). Se agrega que, en la administración divina del universo ni un solo acto de bondad, por pequeño que sea, quedará sin recompensa. El Señor mismo premiará cada acto de bondad que hayamos hecho: “Y todo aquel que dé de beber tan sólo un vaso de agua fresca a uno de estos pequeños, por ser discípulo, os aseguro que no perderá su recompensa”. (Mt 10:42).

La bondad, la caridad, la solidaridad, el compartir no puede significar que, debamos ser patrocinadores de personas sanas y llenas de vida que, quieren vivir de los demás; que se comportan como parásitos sociales que, con descaro “viven” de aprovecharse del buen corazón, de la generosidad de los buenos cristianos y, en la Biblia en ninguna parte, se excusa la holgazanería, la flojera y el descaro; por el contrario: "Además, cuando estábamos entre vosotros os mandábamos esto: Si alguno no quiere trabajar, que tampoco coma. Porque nos hemos enterado que hay entre vosotros algunos que viven desordenadamente, sin trabajar nada, pero metiéndose en todo. A ésos les mandamos y les exhortamos en el Señor Jesucristo a que trabajen con sosiego para comer su propio pan." (2 Tes 3:10-12)

Viernes 28 de Noviembre

Inicio del Ayuno de Navidad o Cuaresma de Navidad:

   Como Cristianos Ortodoxos, comenzamos la celebración del Nacimiento de Cristo con un tiempo de preparación contados cuarenta días antes de la fiesta del nacimiento de Nuestro Señor en el período del ayuno de Navidad: para purificar nuestra alma y nuestro cuerpo para entrar propiamente y compartir la gran realidad espiritual de la venida de Cristo. Esta época del ayuno no es tan intensa como es característica de la Gran Cuaresma; más bien, la Cuaresma de Navidad es más dada en los monasterios que en la vida de Laicos, No obstante, se refleja en la vida de la Iglesia como un anuncio de la fiesta venidera. Dentro de estos cuarenta días de preparación (28 de Noviembre al 6 de Enero) el pescado, el vino y el aceite de oliva son permitidos, se exceptúan los Miércoles y Viernes hasta el 17 de Enero. En la víspera de la Fiesta de la Entrada del Theotokos en el Templo, nosotros tenemos el primer anuncio de los nueve "hirmos" del Canon de Navidad: "¡Cristo nace, glorifiquemosle!"; con estas palabras algo cambia en nuestra vida, en el aire que nosotros respiramos, en todo el ánimo de la vida de la Iglesia. ¡Es como si nosotros percibimos lejos, muy lejos, la primera luz de la más grande alegría posible la venida de Dios a Su mundo!; Así la Iglesia anuncia la venida de Cristo, la Encarnación de Dios, Su entrada en el mundo para su salvación. Entonces, en los dos domingos precedentes a Navidad, la Iglesia conmemora a los Antepasados y a los Padres: los profetas y los santos del Antiguo Testamento que prepararon la venida y que fueron parte de la historia de esa espera, por la salvación y conciliación de humanidad con Dios.

Santoral

Domingo 24 Post-Pentecostés/ TONO 7

Domingo 23

Erásto/Olimpo/Herodion/Sosipatro: 70Ap-I

(Ef 2:14-22/Lc 10:25-37)

Semana 25 Pos-Pentecostés/Tono 7

Lunes 24 

Menas-Compñrs-Mr-304/ Teodoro el Studita Mj-826

(2Tes 1:1-10/Lc  14:12-15)

Martes 25 

Juan el limosnero Ob-Alejandría-619/ Nilo Mj-Sinaí

(2Tes 1:10-2:2/Lc 14:25-35)

Miércoles 26 

Juan Crisostomo ArOb-Constpl-407

(Heb 7:26-8:2/Jn 10:9-16) (2Tes 2:1-12/Lc 15:1-10)

Jueves 27 

Ap-Felipe/ 70Ap-I / Gregorio Palamas Ob-Tesalónica-1360

(1Cor 4:9-16/Jn 1:43-51) (2Tes 2:13-3:5/Lc 16:1-9)

Viernes 28 

Gurias Cosme: Mr-IV/

INICIO AYUNO DE NAVIDAD

(2Tes 3:6-18/Lc 16:15-18,17:1-4)

Sábado 29 Ap-Ev-Mateo 

(1Cor 4:9-16/Mt 9:9-13) (Gal 1:3-10/Lc 9:57-62)